lunes, 14 de enero de 2019

ANÁLISIS CRÍTICO DE LA PELÍCULA "FÁTIMA, EL ÚLTIMO MISTERIO"


ANÁLISIS CRÍTICO DE LA PELÍCULA
“FÁTIMA, EL ÚLTIMO MISTERIO”

(Por Eduardo Peralta[1])




“Hazle saber al Santo Padre que yo siempre estoy esperando
la Consagración de Rusia a Mi Inmaculado Corazón.
Sin la Consagración, Rusia no se podrá convertir
y tampoco tendrá paz el mundo"

(Nuestra Señora de Fátima a Sor Lucía, mayo de 1952)


…hoy, una vez más, escuchamos la llamada de la Virgen de Fátima
a consagrar Rusia a su Inmaculado Corazón,
de acuerdo con su instrucción explícita”.

(Card. Raymond Burke, 2017)



                Con gran entusiasmo para muchos fieles católicos se ha reproducido en los cines de distintas provincias del país –como en gran parte de Latinoamérica-, a pedido de la gente, la película realizada por Goya producciones en colaboración con Fundación Cari Filii, sobre las apariciones y mensajes de Nuestra Señora de Fátima. Es difícil realizar una crítica global de la misma en dos palabras. Es decir, cuando a veces nos preguntan ¿qué te pareció tal o cual película?, respondemos “es buena”, “muy buena”, “es mala”, o bien, “me gustó”, “no me gustó”. En este caso no podemos limitarnos a dar estas respuestas, ni siquiera a agregar la película “pero”, sino que es preciso decir algo más tratándose de un tema que versa sobre cuestiones que atañen, en lo natural y sobrenatural, al pasado como al futuro.
            Podría dividirse el film en varias partes como para estudiar cuáles de ellas son más fieles a lo acontecido y anunciado por Nuestra Señora en Fátima. Sin embargo, para ser todavía más didácticos estableceremos dos parámetros generales siguiendo aquello del ser y del acontecer histórico. Es decir, el acontecer estaría representado por los hechos puntuales que tuvieron lugar en Fátima y en el mundo en relación a las apariciones. En cuanto al ser del film, hay que decir que se refiere a las consecuencias de esos hechos y mensajes, la interpretación de los mismos y su valoración y proyección a la luz de la fe y de la razón.
            La complejidad de Fátima es otro de los obstáculos para poder hacer un juicio valorativo sobre el film, sumado a que es una verdad que no todo debe y puede ser representado en una película de 80 minutos. Del modo que fuere hay elementos concretos que merecen ser notados y otros tantos que precisan ser discutidos, para luego hacer una valoración conclusiva.
            Si se nos pide brevedad inmediata, diremos que es una cinta que tiene algunas luces, especialmente en lo artístico y estético, en el montaje, la producción, el guión, el despliegue de recursos gráficos, el tratamiento de algunos temas históricos, los hechos puntuales de 1917 en Portugal, etc.; pero que tiene sombras en lo que respecta al ser de la película, es decir, lo referido a la interpretación de algunos hechos, la lectura histórico política de la revelación mariana y, de modo especial, en lo que respecta a la tercera parte del secreto. Cuando hablamos del ser del film, nos referimos a lo más importante. Lo que respecta al ser es lo sustancial y primordial. El acontecer –que en este caso no está exento de vicio- es también importante, pero en sentido ontológico corresponde más bien a lo accidental, a lo externo y pertenece al ámbito del fenómeno.

  1. Aspectos positivos

            Antes de ser tildado y señalado como aguafiestas, pesimista, criticón, mente cerrada, conspiranoico, retrógrado, integrista, preconciliar y, por qué no, “anti-Fátima”, etc., para ser todavía más específico, haré un recuento de los elementos que considero positivos y buenos de la película:
-          Los hechos históricos de las apariciones del Ángel de Portugal, la Santísima Virgen y la representación de las visiones del infierno y del resto del secreto (aunque no se menciona todo), es muy bueno y fiel. Quizás podría agregarse el hecho de que la aparición de la Virgen en 1917 ya había sido profetizada mucho tiempo antes, pero esto no cambia lo esencial de las apariciones.
-        Se da un mensaje concreto de que la oración y particularmente el rezo del Santo Rosario todos los días es un medio eficaz de asistencia celestial ante todo tipo de dificultades.
-         Se recomienda vivamente la devoción de los cinco primeros sábados[2].
-       Se menciona la existencia de una persecución laicista y masónica contra la Iglesia en 1917 y la intencionalidad perversa del gobierno de Portugal por aquellos días.
-    Se establece una relación causa-efecto, hecho-consecuencia, pecado-castigo, oración-misericordia de Dios, etc. En el film, la historia ficticia de una mujer viuda (Mónica), resentida con Dios y su acercamiento o retorno a la Fe y devoción mariana se debe, en parte, a que comprueba y admite que las profecías de la Virgen se ven cumplidas en muchos hechos históricos, y no se trata de meras suposiciones. Este es uno de los grandes propósitos, si no es el mayor, de la cinta. En la página oficial y descripción del producto se lee: “¿Ha marcado Fátima la historia del mundo? Extrañas coincidencias parecen indicar que las misteriosas apariciones de Fátima han marcado el rumbo de la historia de estos 100 últimos años. ¿Podría el mensaje de Fátima darnos claves sobre nuestro futuro? Este es uno de los grandes interrogantes que trata de desvelar esta película documental”[3].
-          Hay una contundente y expresa mención del Comunismo y de sus distintos regímenes ya sea en la URSS como en el resto del mundo, al cual se relaciona con el castigo o la consecuencia advertida por la Santísima Virgen el 13 de julio de 1917: Si atendieran a mis deseos, Rusia se convertirá y habrá paz; si no, ella esparcirá sus errores por el mundo promoviendo guerras y persecuciones contra la Iglesia. Los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá mucho que sufrir, varias naciones serán aniquiladas”.
-          Comparación explícita del régimen comunista con el nazi, dejando a las claras que el primero fue mucho peor que el segundo, por su magnitud, duración histórica, y su efecto catastrófico que aún perdura. Dejando muy en claro que el Comunismo mató y exterminó a más de cien millones de personas, sin contar los muertos por algunos gobiernos socialistas de Latinoamérica. Cifra que corresponde a la denunciada en “El libro negro del comunismo”[4].
-          Se admite la infiltración marxista en los distintos órdenes, incluida la Iglesia.
-          Se hace mención de otras persecuciones de cristianos como por ejemplo en Corea del Norte y se hace alusión a las víctimas del Islam con el yihadismo.
-          Se deja en claro el ataque actual contra la Familia, siguiendo aquellas palabras de Sor Lucía en las que señala que “la batalla final entre el Señor y el reino de Satanás será acerca del matrimonio y de la familia. No teman, añadió, porque cualquiera que actúe a favor de la santidad del matrimonio y de la familia siempre será combatido y enfrentado en todas las formas, porque esta es la cuestión fundamental (…) Sin embargo, Nuestra Señora ya ha aplastado su cabeza”[5].
-          Se hace alusión expresa del peligro que representa la Ideología de Género para las naciones y la consecuencia inmediata de aceptar en las leyes esta perversión: la disolución del fundamento de toda sociedad, la familia cristiana.
-          Un detalle y nota de color puede ser también que en la historia ficticia de la película hay una mujer embarazada de 12 semanas. En un diálogo se dice expresamente que allí hay tres personas (padre, madre e hijo en gestación). Si bien es un detalle, no es algo menor teniendo en cuenta que los proyectos actuales que pretenden imponer el aborto –y las leyes ya aprobadas en otros países incluyendo España, de donde es oriunda la filmación-, se formula que hasta las 12 semanas podría ser “interrumpido” el embarazo, acabando así con la vida del inocente.
            Posiblemente se nos escapen muchos otros aspectos positivos de la película, pero creemos haber mencionado los más notables e importantes. En términos generales debemos decir que el efecto que produce en las personas que acuden a ver el film es positivo. Las personas que no conocen los pormenores de Fátima y que han visto la película nos han manifestado un particular movimiento de devoción hacia la Virgen, una necesidad de recuperar el rezo del Santo Rosario y de promoverlo, como así también la devoción de los cinco primeros sábados. Asimismo observamos un movimiento en pro de combatir el error y una apertura de las inteligencias a comprender los hechos históricos del siglo pasado en relación a lo manifestado en Fátima. Cosas estas muy plausibles, por supuesto. Pero que deben ponerse en la balanza teniendo en cuenta lo que detallamos a continuación.
2.      Aspectos negativos, errores y omisiones
            El lector desprevenido podría preguntarse en estos momentos si puede afirmarse que hay cosas negativas en la película, y posiblemente respondería que no. Lo es si no se conocen algunos pormenores de lo que se refiere a Fátima, a la Consagración de Rusia y a otros hechos que tendrían relación con la tercera parte del Secreto. Algunos errores son más notables y otros más sutiles, sin embargo intentaremos detallarlos a continuación.
a)   “Los errores de Rusia”
            En cuanto a aquello anunciado por la Virgen según lo cual si no se atendían los pedidos del Cielo los errores de Rusia se esparcirían por el mundo, parece haber un reduccionismo de interpretación. Existen en el documental algunas afirmaciones que pretenden explicar aquello de los “errores” y, si bien es cierto que la Santísima Virgen dijo que estos males producirían guerras y persecuciones, el film acota el término “error” a las guerras y al Régimen Soviético. Con lo cual estos males parecen haber cesado al caer el muro de Berlín en 1989.
            Es totalmente acertado que la expansión del comunismo era precisamente el cumplimiento de aquellas palabras, pero no puede olvidarse que, aún desmoronado el régimen, los males del mismo no fueron aniquilados, sino todo lo contrario. Simplemente desapareció el “envoltorio político” del error, como ha afirmado el Prof. Roberto de Mattei. En consecuencia, sin su envoltorio, la difusión de los errores permitió una difusión todavía más grande. No se puede olvidar que las bases filosóficas y doctrinales del marxismo seguían en pie. Más todavía, habían sido replanteadas en la filosofía de la praxis de Antonio Gramsci, quien reformuló la doctrina marxista haciéndola aún más destructiva con la llamada Revolución Cultural, que ya venía siendo aplicada desde hacía varias décadas.
            Fruto de los errores son los organismos como la ONU, el FMI, el CFR, el Banco Mundial, las políticas internacionales de reducción de población, la IPPF, la promoción del aborto (el primero en legalizarlo fue precisamente Lenin en 1920) y la eutanasia (en suma, la “cultura de la muerte”); errores todos que bajo sistemas capitalistas y liberales están plagados de principios socialistas y marxistas.
            Bien ha señalado el Prof. Roberto de Mattei sobre esta cuestión que “la palabra error es precisa: el error consiste en la negación de la Verdad (…). Los errores rusos son los de una ideología que se opone al orden natural y cristiano porque niega a Dios, la religión, la familia  y la propiedad privada”. Por eso advierte y enseña que “con demasiada frecuencia se ha identificado al comunismo con un régimen meramente político, olvidando su dimensión ideológica, cuando es precisamente su aspecto doctrinal el que pone de relieve Nuestra Señora”[6].

b)     “Muchas naciones de la tierra desaparecerán sobre la faz de la misma”
            Sobre la interpretación de estas palabras parece haber un nuevo reduccionismo, dado que se estrecha y acota la cuestión a lo acontecido en Polonia, dando como resultado que la destrucción de las naciones no se habría cumplido por intercesión de la Virgen. Polonia no desapareció, se salvó de ser aniquilada por los distintos regímenes totalitarios. Si bien esto es cierto e incluso pueden traerse a colación otras naciones salvadas de la destrucción y del error del Comunismo, no puede negarse que tanto con la expansión de la Unión Soviética, como con los efectos de la Segunda Guerra Mundial hubo naciones que perecieron y que fueron devastadas. Omitirlo es un grave error.
            No decimos con ello que los hechos de carácter milagroso en distintas naciones no hayan existido. Al contrario. En Portugal, entre otras naciones, luego de que los obispos consagraran la nación al Inmaculado Corazón (13 de mayo de 1931), acontecieron grandes prodigios de protección celestial, confirmados por la mismísima Virgen[7]. Para empezar hubo un renacimiento de la vida católica, aumento de vocaciones sacerdotales, la cuadruplicación del número de religiosos en apenas diez años, entre otras cosas que atañen a la Fe. Los mismos obispos en una Carta Pastoral declararon que “tan profunda fue la transformación” que “si hace veinticinco años alguien hubiese cerrado los ojos y sólo ahora los abriese, ya no reconocería Portugal”. Por otra parte es explícito en el documental el notable y radical cambio político, aunque no se menciona a su protagonista: Antonio de Oliveira Salazar, quien puso en marcha un programa católico y contrarrevolucionario y en contra del Socialismo y Liberalismo. Como consecuencia Portugal fue preservado del terror comunista y de los efectos de la Guerra Civil que asoló a España. También quedó al margen de la devastación de la Segunda Guerra.
            Lo que señalamos, entonces, es la omisión de las naciones que efectivamente fueron desfavorecidas, independientemente de los efectos sanadores de la intercesión mariana en el resto del mundo. No puede, entonces, afirmarse por completo que la Virgen haya anulado con su milagrosa intercesión sus propias palabras sobre la aniquilación de las naciones, quedando éstas sin efecto. No se olvide, por ejemplo, lo acontecido con Yugoslavia convertida en una república socialista tras el final de la Segunda Guerra y que tras su disolución nacieron cinco estados (Eslovenia, Croacia, Bosnia, Macedonia y la Unión Estatal de Serbia y Montenegro). Otrosí se diga de Checoslovaquia, el conflicto entre Vietnam del Norte y Vietnam del Sur, la dominación de la URSS sobre la República Democrática Alemana, etc. Tampoco debe olvidarse que luego de la Segunda Guerra, los vencedores se repartieron el mundo en los tratados de Yalta y Postdam (agosto de 1945).
            Es importante señalar que la Virgen pone una condición: “si atendieran a mis deseos, Rusia se convertirá y habrá paz”. La condición no se cumplió y entonces se llevó a cabo: “si no, ella esparcirá sus errores por el mundo promoviendo guerras y persecuciones contra la Iglesia. Los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá mucho que sufrir, varias naciones serán aniquiladas”. Que esto haya sido y sea así, no significa que no se puedan cumplir las palabras “al final mi Corazón Inmaculado triunfará”.
            Debemos mencionar también aquí que no es posible relacionar el impedimento de alguna catástrofe o guerra nuclear como el cumplimiento de Fátima en forma definitiva. El mismo obispo de Fátima, Alberto Cosme de Amaral, en el aula magna de la Universidad Técnica de Viena, declaró (10 de septiembre de 1984), que identificar el secreto de Fátima con anuncios catastróficos o algún holocausto nuclear, significa deformar el sentido del mensaje (…) la pérdida de la fe de un continente es peor que la aniquilación de una nación; y es un hecho que la fe está continuamente disminuyendo en Europa”[8]. Muchas naciones no se disolvieron, es cierto, pero la gran mayoría perdió su norte espiritual, fueron descristianizadas.
             A propósito de la guerra atómica hay que decir que una cosa es que la consagración hecha por Juan Pablo II en 1984 haya impedido un conflicto de tal magnitud, y otra cosa muy distinta es que con ello se cumple la tercera parte del secreto. Son dos cosas distintas. De hecho, sobre la intervención divina la misma Lucía es quien ha dicho: “La consagración de 1984 evitó una guerra atómica, que habría tenido lugar en 1985”[9].

c)      Sobre Gorbachov y la caída del Bloque Soviético

            En la película se da a entender como un cese definitivo de los errores de Rusia, propio del reduccionismo que describimos en el punto “a”, el hecho de la caída del muro de Berlín. Por lo que se cumpliría aquello de “será dado al mundo un tiempo de paz”. Es cierto que fue notable la disminución de las guerras, pero eso no implica por completo que se haya dado el “tiempo de paz”. El documental refiere de modo explícito que la Virgen venció finalmente sobre el Comunismo con el pacto de Gorbachov y con la caída del régimen. Puede afirmarse sí, que hubo una particular intercesión de la Virgen para que estos hechos sucedieran, eso no cabe duda. Pero el error del comunismo no fue aniquilado, como ya se vio.
            Tampoco pueden relacionarse estos hechos con la tercera parte del secreto. El 17 de marzo de 1990, el Cardenal Silvio Oddi, amigo personal de Juan XIII, declaró que el “tercer secreto” “no tiene nada que ver con Gorbachov”, y que en cambio, “la Santísima Virgen nos está alertando sobre la apostasía en la Iglesia”[10]. Cosa que detallaremos luego.
            Fue, entre otros, el Cardenal Sodano, secretario de Estado Vaticano, quien malinterpretó intencionadamente y desvió la atención sobre la tercera parte del secreto, dándola por cumplida con el fin de la URSS. El mismo dijo que el secreto se refería “a la lucha de los sistemas ateos contra la iglesia” y que “el secreto habla del fin del comunismo, anticipa los acontecimientos de 1989”.
            En el documental se entrevista, entre distintos especialistas sobre Fátima, a Joaquín Navarro-Valls, quien fuera portavoz del Papa Juan Pablo II. Este hombre, fallecido el pasado 5 de julio, ofreció para esta película su último reportaje en diciembre de 2017[11]. En ella dice muchas cosas que iremos comentando, pero que muestran a las claras que no se trata de un especialista en la materia, sino todo lo contrario. En cuanto a lo que venimos tratando, señaló: “ninguna persona que yo conozca, en esa época, esperaba que se hundiera el bloque del Este en su vida”[12].
            Sin embargo, contra las afirmaciones antes mencionadas del Cardenal Sodano y contra las afirmaciones de Navarro-Valls, están, ni más ni menos, que las afirmaciones del Papa Juan Pablo II. En efecto, ni el Pontífice creyó que la apertura del Este fuese la gran victoria prometida por la Madre de Dios, como tampoco lo vio imposible o impensable. Todo lo contrario. Luego de haber hablado sobre Fátima y sobre la promesa de la conversión de Rusia y respecto de su aparente cumplimiento, dijo:
     “Sería demasiado fácil decir que la Divina Providencia hizo caer al comunismo. El comunismo como sistema, en cierto sentido, se derrumbó solo. Se derrumbó como consecuencia de sus propios errores y abusos. (…) sin embargo, se derrumbó solo, a través de sus propias e inherentes debilidades”[13].
            El Padre Gérard Mura se pregunta si es posible pensar que con la “Perestroika”, la caída del Muro de Berlín y la apertura del Este, el comunismo ya fue superado; hipótesis que en la película de marras se afirma rotundamente. Agregaría argumentos a favor de tal hipótesis el pensar que, en efecto, los países satélites del Pacto de Varsovia han sido liberados de la dominación soviética y cuentan hoy con estructuras democráticas; la cortina de hierro cayó y las dos Alemanias se han reunificado, el sistema económico del comunismo ha caído y ha sido sustituido por sistemas orientados a la economía social de mercado occidental.
            Contra esto hay que responder que “si bien el comunismo bolchevique se derrumbó, el mismo mantiene una vigencia histórica, hoy calificada como «neocomunismo» o «neosocialismo»”[14]. El modelo bolchevique cambió y se redefinió asumiendo un modelo distinto y más complejo, con una acción política indirecta, fundada en un proceso de revolución cultural. Proceso que mencionábamos anteriormente, mentado por Antonio Gramsci, y puesto en práctica entre otros organismos por la Escuela de Frankfurt y todo lo que atañe al marxismo cultural.
            Finalmente, el “tiempo de paz” sería dado “al mundo”, y no sólo a Rusia. Al mirar el contexto mundial y sus hechos, nos llevamos una gran sorpresa, puesto que luego de 1989 las muertes en el mundo debido a las guerras fueron aterradoras. En un diario portugués (24 horas), del 19 de abril de 1999, se publicó una visión general sobre las guerras, que se han dado en el decenio transcurrido a partir de 1990. Las cifras hablan por sí mismas. En ellas no están consideradas todas las guerras civiles[15] y se cuentan 5.929.650 muertos.
            Téngase en cuenta que las palabras de la Santísima Virgen son: “Rusia será consagrada y se convertirá, y un tiempo de paz será dado al mundo”. De ello se colige que el tiempo de paz va unido a una anterior consagración de Rusia y a su respectiva conversión, cosas estas que no se han dado hasta la fecha.

 d) ¿Se convirtió Rusia?

            Como acabamos de decir, no, Rusia no parece haber realizado una conversión. ¿Y esto por qué? Muy sencillo: para que exista conversión debían primero cumplirse los pedidos de la Virgen, pero al no cumplirse no puede (todavía) darse la conversión. Que puede haber un ambiente más o menos favorable al catolicismo, eso no lo ponemos en discusión. Pero afirmar sin más que Rusia se ha convertido, es una suposición temeraria.
            La película se basa en un testimonio para afirmar esto. Es el del sacerdote Alejandro Burgos, quien tiene a cargo una parroquia rusa de Rito Bizantino, y dice: “Creo que eso se ha cumplido, Rusia se ha convertido, en el sentido al menos de que ya se puede predicar y vivir la fe, como muestran mis parroquianos, por ejemplo; lo digo para que no nos olvidemos de dar gracias a la Virgen”. Pues bien hay algunas cosas por decir sobre este testimonio.
            En primer lugar que se trata de una afirmación de una persona en particular, en este caso sacerdote. Por otra parte su afirmación la realiza desde su experiencia exclusiva de la propia parroquia. Además, él mismo lo menciona, esto sería “en el sentido al menos” de que ya se puede predicar y vivir la fe. Digamos que una experiencia particular, no puede llevarse a una regla y verdad general, menos en un marco tan amplio como lo es todo Rusia. Que en su parroquia se pueda predicar y vivir la fe, no significa que en todo Rusia sea así. De hecho en nuestra Argentina, se puede predicar y vivir la fe, y esto no sólo en la parroquia a la que asisto, sino en todo el país, al menos por el momento. Sin embargo que esto sea así no me da pie para afirmar que vivimos en una Argentina convertida, y católica. La pregunta sería, ¿qué se entiende por “conversión de Rusia”?
            Sor Lucía entendió lo que la Virgen Santísima en Fátima le dijo, de la siguiente manera, según lo atestigua el P. Joaquín Alonso, CFM:
     “Lucía siempre ha pensado que la conversión de Rusia no se entiende solamente como un retorno de los pueblos rusos a la religión cristiano-ortodoxa, rechazando el ateísmo marxista de los Soviets, sino que se refiere simple y plenamente a la conversión total e integral mediante un retorno a la única y verdadera Iglesia, católica, romana”.
            Sumado a estas palabras están las referidas por la misma Sor Lucía, quien nos cuenta que luego de la revelación que tuvo en Tuy, el 3 de enero de 1944, antes de poner por escrito el Tercer Secreto, sintió en su corazón una voz suave que le decía:
     “Con el tiempo, habrá una sola fe, un solo bautismo, una sola Iglesia, Santa, Católica y Apostólica. ¡En la eternidad, el Cielo!”
            En concreto, el credo católico-ortodoxo abrazaría por completo el dogma de la Fe. Esto se comprende todavía más si se tiene en cuenta el contexto en el que la Virgen dijo estas palabras. Es decir, Nuestra Señora promete “Rusia se convertirá” (si atienden a mis súplicas), en 1917, cuando todavía no era Comunista y cuando aún era ortodoxa. Ergo, conversión implica sí o sí, el regreso a la Fe católica, apostólica y romana, por completo.
            San Maximiliano Kolbe profetizó la futura conversión de Rusia con las siguientes palabras: “Veréis un día la imagen de la Inmaculada colocada en la más alta almena del Kremlin”. Esto no sólo apunta a la conversión política de Rusia, sino a abrazar, entre otras cosas el dogma de la Inmaculada Concepción, el cual no es reconocido por los ortodoxos. Después de la apertura del Éste, en 1994, la jerarquía ortodoxa publicó un “Catecismo Ortodoxo Anticatólico”. Este libelo, propagado por la jerarquía entre los fieles y sacerdotes, afirmaba que “el fiel ortodoxo que reza con católicos, ya sea en la iglesia o en la casa, está excomulgado; que un matrimonio con un católico debe ser disuelto y que los católicos no merecen ser llamados cristianos”[16]. Sabiendo esto, ¿podemos afirmar la conversión de Rusia como  ya cumplida?
            ¿Cuál es el hecho mencionado como prueba del acercamiento entre católicos y ortodoxos en la película? La reunión entre el Patriarca de la iglesia ortodoxa rusa y el Papa Francisco en la primera mitad de 2018, en Cuba. ¿No es pobre el argumento?

e) Sobre la Consagración del Papa Juan Pablo II en 1984


            Todas las afirmaciones erróneas de la película parten del hecho de dar por cumplida la Consagración de Rusia. Sin embargo, los hechos muestran que no fue así. Ninguno de los intentos de consagración cumplió con los requisitos puestos por la Santísima Virgen. A saber, debe mencionarse especial y expresamente a Rusia (puesto que es ella la que se quiere consagrar), lo debe hacer el Santo Padre en comunión con todos los obispos del mundo, debe ser solemne y tener carácter público; además debe realizarse en reparación por las ofensas al Corazón Inmaculado de María, aprobando y recomendando la devoción de los cinco primeros sábados.
            Ni Pío XII, el 31 de octubre de 1942, ni Juan Pablo II en sus tres intentos (13/05/81, 16/10/82 y 25/03/84), pudieron realizar al consagración conforme a las palabras de la Virgen de Fátima. Lo cual fue afirmado también por la misma Sor Lucía en distintas oportunidades. En cuanto a la primera, de SS. Pío XII, escribió Lucía: “El Señor ha agradecido la consagración del Mundo de Octubre de 1942 al Corazón Inmaculado de María, aunque fue incompleta según su pedido; promete igualmente poner rápido fin a la guerra. La conversión de Rusia en cambio no ocurrirá por ahora. El segundo intento del mismo Pontífice tendrá similar deficiencia: “Estoy dolorida porque la consagración de Rusia no ha sido hecha aún como la Santísima Virgen la había pedido. Más adelante, respecto de Juan Pablo II en su primer intento, señaló en una entrevista con el Nuncio papal, el Dr. Lacerda y con el P. Messias Coelho, que la consagración no se había realizado por no ser Rusia el objeto y  no haber participado los obispos del mundo. El texto preparado para el nuncio terminaba: “La Consagración de Rusia no se ha hecho como Nuestra Señora ha pedido”.
            Pero, ¿en qué se basa la película para afirmar que la consagración fue realizada completamente? El ya mencionado Joaquín Navarro Valls explica en el documental que luego de la consagración de 1984 “Juan Pablo II preguntó a Sor Lucía de Fátima si con esa consagración se cumplía lo que la Virgen había solicitado en Fátima, y ella dijo que sí”. Mons. Tarcisio Bertone[17], sostiene también que se habría realizado en marzo del 84’ “como quería Nuestra Señora”, y entonces “todas las peticiones ulteriores carecen de fundamento”. Pero ¿realmente esto es así? Hay pruebas de sobra para probar lo contrario.
            En primer lugar está el hecho de la fórmula de la consagración: “¡Madre de la Iglesia, ilumina especialmente a los pueblos de los que Tú espera nuestra consagración!”. Claramente, no se nombra Rusia. Sin embargo, cuando le preguntaron a Sor Lucía en septiembre de 1985, afirmó que la consagración de Rusia todavía no había sido realizada[18]. En mayo de 1989 Sor Lucía le confiesa al Card. Law (Boston), sobre la consagración del 84’: “El Santo Padre se justificó diciendo que ha sido hecha, hecha de la mejor manera posible bajo las circunstancias. ¿Hecha sobre el camino angosto de la consagración colegial que Ella ha exigido y ha estado esperando? No, eso no se ha hecho”.
            ¿Qué dijo, entonces, Sor Lucía? Muchos afirman que Lucía habría dicho que “la consagración de Rusia al Inmaculado Corazón ya ha sido realizada”. Pero estas palabras eran de una serie de cartas de Lucía escrita a máquina y en PC, cosa que Lucía jamás hizo (siempre escribió a mano). Sobre ello, Carolina, hermana de sangre de Sor Lucía, dijo el 11 de octubre de 1990: “No puede uno fiarse de ‘cartas de Sor Lucía’ escritas a máquina, porque ella ni siquiera sabe escribir a máquina”. Se sabe, además, por la revelación del P. Messias Coelho (julio de 1989), experto en Fátima, que Sor Lucía recibió una instrucción anónima de la burocracia vaticana, según la cual ella y sus compañeras quedan obligadas a decir que la Consagración de Rusia fue realizada válidamente en marzo de 1984. De hecho a partir de entonces María do Fetal, prima de Sor Lucía, comenzó a contradecir sus propias palabras afirmando la validez de la consagración del 84’.
            El hecho de que no se mencionara explícitamente a Rusia, tiene sugestivas y curiosas explicaciones[19]. El Padre Gabriele Amorth, exorcista de Roma, testimonia lo ocurrido en 1984 de la siguiente manera:
            “Yo estaba allí, a pocos metros de él. Yo era el organizador del evento en la Plaza de San Pedro. Era el 25 de marzo y el Papa tenía la imagen de Nuestra Señora de Fátima que venía de Fátima, la estatua que por lo general permanece en el gran santuario de Fátima. Pero en esa ocasión él quería la estatua allí. Arrodillado frente a la estatua, intentó la consagración, pero todos los políticos a su alrededor le dijeron, ‘no se puede nombrar a Rusia. Y él volvió a preguntar: ‘¿Puedo nombrarla?’ y ellos dijeron, ‘No, no, no’[20].

g) ¿Y la tercera parte del Secreto?

            Otro de los gruesos errores que contiene este film se refiere a la tercera parte del secreto o “tercer secreto”. Diremos que el secreto es sólo uno que está dividido en tres partes: 1°) visión del infierno (representa el peligro para el alma), 2°) Consagración de Rusia al Corazón Inmaculado de María (representa el peligro para el Mundo) y 3°) Visión del ángel pidiendo penitencia y del Santo Padre subiendo a la colina de la cruz, cayendo muerto de manos de los soldados con disparos y flechas (representa el peligro para la Iglesia).
            En este caso el error es doble porque por un lado se afirma que no hay nada del Secreto que esté oculto y que no se haya dado a conocer, cosa que, como veremos, es falsa. Por otro lado se afirma que el atentado sufrido por Juan Pablo II es el cumplimiento de la visión de los pastorcitos. Vamos por partes.
            El antes mencionado Joaquín Navarro Valls se refiere en el documental al Tercer secreto de forma rotunda y convencida. Sobre si oculta la Iglesia parte del secreto, dice:
     “No me interesan personalmente ninguna de estas post interpretaciones que no tienen más  base que la pura fantasía humana. ¿Que no se ha dado todo? Lo conozco de dentro, y sé que se ha dado todo y fotocopiado. Todo eso no me interesa en lo más mínimo. Me atengo exclusivamente a los textos y a lo que nos han transmitido ahora y antes, cuando estaban vivos los tres videntes de Fátima esos textos. La idea de que no se ha dado todo es ridícula. No tiene base. ¿Han visto algo más que no se ha dado? No, son fantasías. No me interesa en nada. Me atengo exclusivamente a los hechos porque los conozco, al menos esta tercera parte, cuando se dio el texto. Y sé que se dio en su integridad y fotocopiado para que se viera su integridad.”
            Las palabras del español guardan dos errores, el primero es sobre la negación de que hay una parte del secreto que efectivamente no se conoce. El segundo, la idea de atenerse a lo que “nos han transmitido ahora y antes, cuando estaban vivos los tres videntes de Fátima”. Algo muy curioso si tenemos en cuenta que Francisco muere el 4 de abril de 1919 y Jacinta el 20 de febrero de 1920. El secreto lo conocemos gracias a los escritos de Sor Lucía y las primeras Memorias fueron escritas por pedido de Nuestro Señor en Tuy el 17 de diciembre de 1927, pero aún así, debía exceptuar el tercer secreto. La segunda Memoria en diciembre de 1935 y, la tercera, en noviembre de 1937. Específicamente la escritura del “Tercer Secreto” data de entre los días 3 y 9 de enero de 1944, muchos años después de la muerte de los videntes Jacinta y Francisco. Entonces, ¿cómo pudo decir Navarro Valls, para sustentar sus afirmaciones, que se basaba en lo que sabía de cuando estaban vivos los tres videntes de Fátima?
            Pasando a aclarar el primer error diremos que es un tema algo complejo y que llevaría mucho tiempo explicar y detallar. Limitándonos a dar las fuentes y los estudios más eruditos sobre el caso, expondremos la verdad de los hechos.
            La interpretación de los más enjundiosos especialistas, sobre los hechos que más parecen concordar con la realidad, es la de pensar que el texto publicado en el año 2000 es auténtico, pero no íntegro[21]. En primer lugar los datos nos muestran que no existe un solo documento o escrito sobre el tercer secreto, sino dos; y en segundo lugar lo que se oculta, lo que no está descubierto, es lo que se refiere a las palabras de la Virgen sobre el mismo.
            Cuando Navarro Valls afirma tajantemente que se atiene al secreto publicado, fotocopiado y autenticado, omite que existe otro manuscrito de Sor Lucía en el que habría puesto por escrito parte del Secreto.
            El primer documento corresponde a que en junio de 1943 Lucía se enferma gravemente y Mons. Da Silva, temiendo su muerte, le ordenó el 15 de septiembre escribir el texto íntegro del Secreto. Luego de tener orden formal y por escrito a su pedido, Lucía sufrió una parálisis que ella consideró sobrenatural, por la que no pudo poner en acto la escritura del Secreto. Finalmente el 2 de enero de 1944 la Virgen le revela que le dará la fuerza y luz necesaria para escribirlo, lo cual hizo al día siguiente. Sin embargo, sólo pudo escribir, en tres páginas de su diario, la visión, pero no las palabras de la Virgen que interpretan la visión.

            El segundo documento corresponde a que después de seis días Lucía escribió en una hoja suelta, las palabras explicativas de la Virgen respecto a la visión. Esto sucedió el 9 de enero de 1944 en la Capilla del Convento de Tuy.
            Algunos testimonios indirectos, confirman la existencia de los diferentes documentos, entre ellos, los del Cardenal Ottaviani, el Cardenal Luigi Ciappi (teólogo personal del Papa Juan Pablo II), el P. José Schwegl (enviado a Coimbra por Pío XII a visitar a Lucía el 2 de septiembre de 1952), el P. Agustín Fuentes (postulador de las causas de beatificación de Francisco y Jacinta) y el Arzobispo Loris Capovilla (ex secretario particular de Juan XXIII, quien pudo leer el segundo documento).
            Las “palabras de la Virgen” referidas al secreto serían las que siguen a “en Portugal se conservará siempre el dogma de la fe, etc. Esto no lo digáis a nadie, a Francisco sí podéis decírselo”. El “etcétera”, por sentido común, es evidente que no pudo ser dicho por Nuestra Señora y que supone un texto al cual reemplaza, no publicado (obviado por Navarro Valls).
            Esto ha sido analizado por Antonio Socci y especialmente por el P. J. M. Hardy, quien analizó la estructura, unidad y concordancia entre las dos partes ya conocidas del Secreto. En efecto, observa que cada una de las dos primeras partes anuncia males para los que la Virgen receta un remedio (contra el infierno, la devoción al Corazón Inmaculado y contra la Guerra, la consagración de Rusia). Pero en la tercera parte faltarían las palabras de la Santísima Virgen a propósito de la visión del Ángel flamígero y de la muerte del obispo vestido de blanco. En septiembre de 1952, el P. Joseph Schweigl, SJ, por orden de Pío XII interrogó a Lucía, y declaró: “puedo decir que el tercer secreto tiene dos partes: una concierne al Papa. La otra lógicamente –no debo decir nada de ella- debería ser la continuación de las palabras ‘En Portugal se conservará siempre el dogma de la fe’”.
            Otro elemento que supone que la virgen explicó y dijo otras palabras es el hecho de que Francisco sólo veía a la Virgen, mientras que Lucía y Jacinta también la escuchaban. Por eso la Virgen añade, luego de lo que contendría el famoso “etcétera”: “Esto no lo digáis a nadie. A Francisco sí podéis decírselo”. Por otra parte está lo referido por Lucía en el interrogatorio de 1924, cuando señala: “después la Sra. dice nos algunas ‘palavrinhas’…”.
            Incluso la Madre Angélica decía: “Con relación al Secreto, lo que ocurre es que yo soy una de las personas que piensan que no hemos recibido la cosa completa”. Y contra quienes señalan que nuestras interpretaciones son catastróficas, negativas, pesimistas, apocalípticas, podemos citar las palabras de Sor Lucía cuando le preguntaron sobre el tercer secreto: “Está en el Evangelio y en el Apocalipsis. ¡Leedlos!”[22].

h) Sobre el atentado al Papa Juan Pablo II y el Secreto de Fátima

            Respecto de la tercera parte del Secreto, puntualmente sobre lo que le acontece a aquél “obispo vestido de blanco”, el documental que venimos comentando contiene otra afirmación errónea, también traídas por boca de Joaquín Navarro Valls. El error consiste en suponer que en el atentado sufrido por Juan Pablo II en 1991 se cumplen las palabras del Secreto anunciado por la Santísima Virgen. Navarro Vals cenó con el Papa el mismo día que éste último visitó en la cárcel a su agresor, Alí Agca. Según el español el Santo Padre le habría explicado en esa cena que Alí Agca no le había pedido perdón, sino que se había limitado a insistirle: “Explíqueme el tercer secreto de Fátima”. Y prosigue Navarro Valls: “Alí Agca decía que si en el secreto se profetizaba su atentado, él sólo habría cumplido los designios de Dios y era un peón en manos de la divinidad”. Y finaliza: “se convenció de que hablaba de él”.


            Pues bien, está claro que esta interpretación viene de manos del agresor de Juan Pablo II, ni siquiera proviene de un teólogo serio o de alguna voz autorizada en la materia. Lo único cierto es que el Papa adjudicó el milagro a la Santísima Virgen luego de saber que el mismo ocurrió el 13 de mayo, Fiesta de Nuestra Señora de Fátima: “una mano materna guió la trayectoria de la bala, y el Papa agonizante se detuvo en el umbral de la muerte”.
            El día de la beatificación de los pastorcitos videntes de Fátima el Cardenal Sodano, entonces Secretario de Estado, hizo una interpretación del Secreto ante los medios. Entre otras cosas se refirió al Papa Juan Pablo II y el atentado, afirmando que “parece alcanzar también a la así llamada parte del secreto de Fátima. (…) El texto constituye una visión comparable a las de la Sagrada Escritura, que no describen en sentido fotográfico los detalles de los acontecimientos futuros”, por lo que la lectura “no puede ser sino de carácter simbólico”. Es decir que para el Cardenal Sodano, la visión es simbólica y la muerte del obispo vestido de blanco es alegórica y estaría representando a lo ocurrido en mayo de 1981. Curiosamente fue el mismo Cardenal el que agregó una partícula al texto, de modo que el obispo vestido de blanco caía “como” muerto. Pero ni la misma Lucía sabía el nombre del pontífice, como le dijo al mismísimo Cardenal Sodano: “Nosotros no sabíamos el nombre del Papa, la Señora no nos ha dicho el nombre del Papa”. Además de ello, los pastorcitos no dudaron de que la persona de la visión es herido de muerte y cae por tierra”. ¿Cómo es posible que, según Navarro Vals y el Card. Sodano, la Virgen anuncie la muerte de un Papa que no muere?
            El entonces Cardenal Ratzinger reconoce que son muchos los pontífices que han sufrido y en el caso de Juan Pablo II: “¿No podía el Santo Padre, cuando después del atentado del 13 de mayo de 1981 se hizo llevar el texto de la tercera parte del “secreto”, reconocer en él su propio destino?”.
            En resumen, mientras el Cardenal Ángelo Sodano afirma que “al fin no hay motivo para esperar hechos futuros: la revelación pública es para todos los siglos, pero las revelaciones privadas son fechadas”, el Papa Benedicto XVI responde el 13 de mayo de 2010 en Fátima que: “El que piensa que el mensaje profético de Fátima ha terminado se engaña a sí mismo”.
            Por otra parte podríamos preguntarnos por qué el mensaje no se refiere al Papa Pablo VI, acuchillado en noviembre de 1970, o al mismísimo Papa Juan Pablo I (como interpretó alguna vez el Abbé de Nantes). En la visión de Fátima el Papa muere, “fue muerto por un grupo de soldados” y de la misma manera, murieron unos después de otros”. Concuerda con la visión que tuviera en 1909 el Papa San Pío X: “He tenido una visión terrible: no sé si seré yo o uno de mis sucesores, pero vi a un Papa huyendo de Roma entre los cadáveres de sus hermanos. Él se refugiará incógnito en alguna parte y después de breve tiempo morirá de una muerte cruel.

i) Una omisión importante

            Omisión que creemos de gran importancia es lo referido por la Virgen en cuanto al peligro que sufriría la Iglesia. Los males anunciados en Fátima parecen reducirse a los errores de Rusia esparcidos por el mundo y las guerras, pero ¿qué hay del peligro que sobrevendría sobre la Iglesia?
            Son muchas las voces que han respondido a esto, incluyendo a los mismos pontífices. Las visiones de los pastorcitos y aquello comentado por Jacinta, que “hacía parte del secreto”[23]. Los males no serían sólo los de Rusia que involucrarían también a la Iglesia, por su persecución y sus mártires, tal como anunció la Virgen.
            El 12 de junio de 1941 Nuestro Señor se mostró dolorido por la indiferencia religiosa y la pereza del Clero español: “deseo vivamente que el Episcopado de España se reúna al menos una vez al año para definir de común acuerdo una reafirmación del estado religioso y de la piedad cristiana en España y para remediar el relajamiento de las costumbres de los sacerdotes y de los religiosos. El Señor necesita del ánimo y de sacerdotes que lo sirvan en espíritu de sacrificio por el bien de todas las almas”.
            El secreto debía ser abierto y dado a conocer en dos fechas “topes”: el año 1960 o la muerte de Lucía. Esto era así porque, como la Virgen señaló, entonces sería más claro para entenderlo[24]. Sabemos que no se hizo, no se dio a conocer y no se realizaron los pedidos de María Santísima. Ya sabemos qué ocurrió con el Comunismo, pero ¿qué hubo para la Iglesia? Poco después de 1960, se llevó a cabo el Concilio Ecuménico Vaticano II, sin dudas el acontecimiento religioso más importante del siglo XX. Así también lo define el documental. El primer día de trabajo del mismo fue el 13 de mayo de 1962, una fecha muy sugestiva por cierto. Ni hablar de la primera congregación general, reunida el 13 de octubre del mismo año. Esto no fue así planeado, dado que el comienzo oficial estaba fijado para el 11 de octubre con una Misa de apertura y según los especialistas no se realizó el Concilio en el espíritu de Fátima[25]. Aquí comienza, en gran medida, la “crisis de fe” anunciada.
            Un día después de la primera jornada de trabajo se producía la crisis de Cuba, que mostraba como inminente el peligro de una guerra mundial a través de una agresión rusa. Precisamente el Comunismo no fue condenado por el Concilio, pese a algunos pedidos, por razones de ecumenismo y diálogo.
            En agosto de 1962, en Metz, el Card. Tisserant, siguiendo órdenes de Juan XXIII, llevó a cabo un pacto entre la Santa Sede y el patriarca ortodoxo Nikodim según el cual la Iglesia se comprometía a que en el Concilio no habría ninguna condena al comunismo y al marxismo. Dom Manoel Pestana Filho señaló el 7 de mayo de 2010 que “dentro del Concilio Vaticano II, no en las reuniones, se hicieron muchos acuerdos con los representantes de Rusia para que no se hablase del comunismo, no se hablase de Rusia. Mas eso es lo contrario del mensaje de Fátima. El centro del mensaje (…) era Rusia, de la cual vendrán grandes males para la Iglesia y para el mundo. Pero hicieron un acuerdo”. Este acuerdo dio lugar a la llamada Ospolitik.
            El 3 de diciembre de 1963, el obispo de Campos (Brasil), entregó al Cardenal secretario de Estado, Amleto Cicognani, una petición firmada por 2013 Padres conciliares de 54 países pidiendo a Paulo VI que se hiciese una constitución conciliar en la que 1) se exponga con claridad la doctrina social católica y sean condenados los errores del marxismo, el socialismo y el comunismo desde lo filosófico, sociológico y económico; y 2) sean erradicados los errores que preparan la mentalidad y espíritu de los católicos para aceptar el socialismo y el comunismo. El ensayo de Plinio Correa de Oliveira (Revolución y Contra-Revolución) fue enviado a todos los Padres conciliares. El Papa habría rechazado este pedido con su silencio. En la siguiente sesión (3ra) que versaría sobre “la presencia de la Iglesia en el mundo moderno”, se trató el ateísmo pero se evitó cuidadosamente la palabra comunismo[26]. Frente a esto, en 1965 (29 de septiembre), 25 obispos de varios países en nombre del Coetus Internationalis Patrum, enviaron a los Padres conciliares una carta circular exponiendo las razones por las que debía tratarse expresamente el problema del comunismo después del párrafo 19 de la Gaudium et Spes. La carta, entre otras cosas, decía: “Mañana el Concilio será criticado –y muy justamente- por este silencio en relación al comunismo, un silencio que será tomado como una señal de cobardía y complicidad”[27].
            Los comunistas vieron en el Concilio una ocasión singular para acercarse e irrumpir en la Iglesia. El Partido Comunista Italiano (PCI) divulgó un número de la revista Propaganda dedicado el “diálogo con los católicos” (1964). En él se afirma que “la extraordinaria irrupción del Concilio, justamente comparado con las Asambleas Generales de 1789, demostró al mundo entero que la vieja Bastilla político-religiosa ha sido sacudida en sus fundamentos. Se produjo así una nueva situación (…). Surge, pues, una oportunidad nunca vista, de aproximarnos de la victoria final mediante una adecuada maniobra”. Otro párrafo dice: “Así, el propio Concilio pone gratuitamente a nuestra disposición los mejores recursos para que lleguemos al público católico”. Y finalmente se afirma: “Nunca la situación nos fue tan favorable”[28].
            El  3 de febrero de 1964 Mons. Proença Sigaud entregó personalmente al Papa Pablo VI una petición firmada por 510 obispos de 78 naciones que solicitaban que el Consejo renovara la consagración del mundo al Inmaculado Corazón de María con especial mención de Rusia. El 21 de noviembre el Papa consagra la raza humana al Inmaculado Corazón al final de la tercera sesión del Concilio, aunque sin mencionar a Rusia. Era sólo un discurso y no una ceremonia solemne como pedía la Virgen[29].
            El mismo pontífice Pablo VI dirá el 7 de diciembre de 1972 que “la Iglesia se encuentra en una hora inquieta de autocrítica o, mejor dicho, de autodemolición”. Y más tarde, en junio de 1972 dirá aquella famosa frase: “por alguna rendija se ha introducido el humo de Satanás en el templo de Dios… También en la Iglesia reina ese estado de incertidumbre. Se creyó que después del Concilio vendría una jornada de sol para la Iglesia. Ha llegado, sin embargo, una jornada de nubes, de tempestad, de oscuridad”. Es preciso retener las palabras “autodemolición” e “incertidumbre”, dado que coincide con lo que dijo Sor Lucía sobre el tercer secreto: “¡Es la desorientación diabólica que invade el mundo y engaña a las almas! … Es que el Demonio ha conseguido infiltrar el mal, con capa de virtud, y andan ciegos guiando a otros ciegos”.
            Los males no pueden reducirse al Comunismo, sino que en el caso puntual de la Iglesia, se refiere al Modernismo que ha causado estragos dentro de la doctrina y, especialmente, de la Liturgia. El entonces Secretario de Estado de Pío XI, luego Pío XII, Card. Pacelli, declaró sobre el mensaje de Fátima: “Me preocupan los mensajes de la Santísima Virgen a la pequeña Lucía de Fátima. Esa persistencia de María sobre los peligros que amenazan a la Iglesia es un aviso del Cielo contra el suicidio que significa alterar la Fe, en su liturgia, en su teología y en su alma (…) Oigo a mi alrededor innovadores que desean desmantelar el Santuario, apagar la llama universal de la Iglesia, rechazar sus ornamentos y hacer que sienta remordimientos por su pasado histórico”. Las palabras del Cardenal se comentan solas y se palpan y comprueban con solo mirar hoy a nuestro alrededor.
            El Papa Benedicto XVI hizo hincapié en que “los ataques al Papa y a la Iglesia no sólo vienen de fuera, sino que los sufrimientos de la Iglesia proceden precisamente de dentro de la Iglesia. Y como Cardenal, reveló al P. Kramer alrededor de 1990 que, “en el Tercer Secreto de Fátima, Nuestra Señora avisaba que no se cambiase la liturgia (…) Nuestra Señora avisó también que habría un Concilio pernicioso en la Iglesia, que causaría grande escándalo”.
            El P. Dollinger, también amigo personal de Benedicto XVI y quien tuvo por varios años de confesor al Padre Pío, recibió el comentario del Papa Emérito. “Poco después de la publicación en junio de 2000 del Tercer secreto de Fátima por la Congregación para la Doctrina de la Fe, el cardenal Joseph Ratzinger dijo en una conversación personal al P. Dollinger que una parte del Tercer Secreto permanece inédita “realmente hay algo más” (“Wirklich da ist noch etwas”). También explicó a Dollinger “que la parte publicada es auténtica, y que la inédita habla de «un concilio malo y una misa mala» que habría en un futuro cercano.
            Nos limitamos a agregar algo más. Diremos que todo cuanto hemos dicho en este apartado ha sido omitido y silenciado en el film. Nada habla en la película del ataque que significa interferir en la doctrina o alterar de algún modo la liturgia.

3. Concluyendo

            Para este documental:

            1° El pedido de la Virgen de Consagrar Rusia al Inmaculado corazón se cumplió inexorablemente en 1984. Como prueba está el hecho de la caída del régimen soviético pocos años después, la disminución de las guerras, entre otras cosas.
            2° Rusia, por lo tanto, se ha convertido. Esto según un sacerdote que afirma que en su parroquia se puede predicar a Jesús.
            3° El tiempo de paz para el mundo se ha cumplido, pese a que el mundo vive en constantes guerras.
            4° Los errores de Rusia, se habrían dejado de dispersar por el mundo luego de la caída del muro de Berlín (y cayéndose los regímenes comunistas restantes).
            5° La persecución y el peligro para la Iglesia y el Santo Padre es siempre desde afuera, nunca desde adentro. No existe una apostasía en nuestros días.
            6° La tercera parte del secreto que habla del papa muriendo y cayendo muerto, se ha cumplido en la persona del Papa Juan Pablo II, en el atentado de 1981.

            Por todo esto, diremos que es una película “políticamente correcta”[30], pero histórica y doctrinalmente incorrecta. Por tal motivo peca por exceso de optimista y contiene una versión recortada de Fátima y su Mensaje. No podemos decir que sea, entonces, una obra “buena” o “muy buena”. Deslumbra a los recién llegados y trae algunas luces que no se dicen, pero tiene carencias y deficiencias que no son menores.
            Vale aclarar que cuando decimos “optimista” no nos referimos a pensar en las palabras de la Santísima Virgen “al fin mi Inmaculado Corazón triunfará”. No, eso no está en discusión. Nos referimos al hecho de ver que todo cuanto se ha profetizado por María en Fátima se ha cumplido ya; y que los males y errores que se vaticinaban, según el film ya fueron superados.
            Nos podríamos preguntar: ¿Es bueno un documental que da por cumplidas las palabras de la Santísima Virgen, que omite importantes hechos, que contiene errores históricos y documentales, que interpreta erróneamente el Secreto anunciado por María Santísima y que calla el hecho de que aún no se ha revelado todo?
            Sin más, traemos las palabras del Profesor Roberto De Mattei: “La consagración de Rusia sigue pendiente; la práctica de la comunión reparadora no está extendida; y sobre el ambiente en que estamos inmersos reina un espíritu de hedonismo degenerado, de satisfacción de todo placer y deseo prescindiendo de leyes morales. ¿Quién puede afirmar entonces, que la profecía de Fátima se ha cumplido y que los grandes acontecimientos anunciados por Nuestra Señora en 1917 han pasado a la historia?”[31].
            Nos queda, ante tanta confusión una promesa: “Al final mi Inmaculado Corazón triunfará”.




Eduardo Peralta.
(San Juan, Argentina. Epifanía del Señor, 2019)
             




[1] Agradezco especialmente al P. Víctor Sequeiros quien estando en Francia hace un año facilitó una serie de documentos sobre Fátima que fueron de gran soporte para la redacción de este informe. Puede verse en: http://comovaradealmendro.com/2018/09/imprescindible-power-point-recopilacion-sobre-fatima-padre-victor-agustin-sequeiros/
[2] Las palabras de la Virgen al pedir esta devoción fueron: “Mira, hija mía, mi Corazón cercado de espinas que los hombres ingratos me clavan continuamente con sus blasfemias e ingratitudes. Tú, al menos, procura consolarme y di que todos aquellos que durante cinco meses, el Primer Sábado, se confiesen, reciban la Santa Comunión, recen la tercera parte del rosario y me hagan compañía durante 15 minutos, meditando sobre los 15 misterios del rosario, en espíritu de reparación, yo prometo asistirles en la hora de la muerte con todas las gracias necesarias para la salvación de sus almas” (Pontevedra, 10 de diciembre de 1925).
[4] AA. VV., El libro negro del Comunismo: crímenes, terror y represión. Editorial Planeta, España, 1998.
[5] Estas palabras de Sor Lucía corresponden a la respuesta de una carta al Cardenal –ya fallecido–, Carlo Cafarra (Arzobispo de Bolonia), y se dieron a conocer en una entrevista al mencionado cardenal el 16 de febrero de 2008.
[6] Roberto de Mattei, Aniversarios que se conmemoran en 2017. En https://adelantelafe.com/aniversarios-se-conmemora-2017/amp/
[7] Sirva como ejemplo la carta que el  2 de diciembre de 1940, le manda Sor Lucía al Santo Padre en la que manifiesta que Portugal contaba con una protección especial durante la guerra, protección que otros países podrían haber tenido si los obispos hubiesen consagrado sus respectivos países al Corazón Inmaculado de María: «Santísimo Padre: (...) en atención a la Consagración del País al Inmaculado Corazón de María, celebrada por los Excmos. Prelados portugueses, Nuestro Señor promete una protección especial a nuestra Patria durante esta guerra; y que esa protección será la prueba de las gracias que concedería a las demás naciones, si, como Portugal, también se le hubiesen consagrado».
[8] Citado en Mensagem de Fátima, febrero de 1985, publicado por el P. Messias Coelho.
[9] Segunda entrevista de Sor Lucía con Carlos Evaristo en febrero de 1998. Cfr. Carlos Evaristo, Two Hours With Sister Lucia, Fátima, 1994, p. 30. Citado por el P. Gérard Mura (FSSPX), en su Fátima-Roma-Moscú: La Consagración de Rusia al Corazón Inmaculado de María aún está pendiente, Santiago de Chile, 2005.
[10] Cfr. Il Sabato, del 17 de marzo de 1990. En la entrevista dice también el Cardenal: “Cuidado, siempre he pensado que una mentira como el Comunismo no podía durar tanto. No se puede tener en la esclavitud permanente a millones de Hombres en nuestro tiempo”. Cfr. también Apostasía en la Iglesia, The Fátima Crusader, Nº 33 (verano 1990), págs. 14-15.
[11] Cfr. Última entrevista de Navarro-Valls: ‘La idea de que el Tercer Secreto de Fátima no se ha revelado por completo es ridícula’. En www.infovaticana.com/2017/07/08/ultima-entrevista-joaquin-navarro-valls-la-idea-no-se-ha-revelado-tercer-secreto-fatima-completo-ridicula/amp/. Puede verse la entrevista a Navarro-Valls en: https://youtu.be/Md75-EQgvKY
[12] Cfr. “Fátima el último misterio”: una película que da claves sobrenaturales del pasado y del futuro. En: https://www.religionenlibertad.com/cultura/56574/fatima-ultimo-misterio-una-pelicula-que-claves-sobrenaturales-del.html
[13] Johannes Paulus II, Die Schwelle der Hoffnung überschreiten, Hamburg, 1994, p. 160. Citado por P. Gérard Mura, Fátima-Roma-Moscú, op. cit., p. 111. El subrayado es nuestro.
[14] P. Gérard Mura, Fátima-Roma-Moscú…, op. cit., p. 28.
[15] Faltarían por ejemplo, el balance de los guerrilleros comunistas islámicos de Filipinas, o las guerras de estados como Etiopía/Eritrea. Empero la lista dada a conocer señala: Sudán, 1.900.000 muertos, Angola, 1.000.000 de muertos
[16] Cfr. P. Gérard Mura, Fátima-Roma-Moscú, op. cit., p. 118.
[17] Tanto el Card. Ángelo Sodano como el Card. Tarcisio Bertone han sido columnas importantes a la hora de sostener la farsa de que Fátima se ha cumplido definitivamente o que el Secreto ha sido revelado por completo. El segundo se encargó especialmente de publicar un libelo en contra del estudio de Antonio Socci (Il Quarto Segreto di Fatima, 2006), titulado La última vidente de Fátima. Contra esta presunta refutación del libro Socci publicó en vísperas de cumplirse 90 años de las apariciones en Fátima, una respuesta breve y por demás elocuente. La misma se titula: “Estimado Cardinal Bertone: ¿Quién es el mentiroso, usted o yo? Y por favor no mencione la masonería”, puede verse aquí: www.statveritasblog.blogspot.com/2013/ 02/fatima-respuesta-de-antonio-socci-al.html
[18] Quienes también negaron la Consagración fueron en 1985 el Cardenal Gagnon, en entrevista con el P. Caillon y, el 25 de octubre de 1987, por el Card. Mayer en audiencia con una docena de líderes católicos. El 26 de noviembre del mismo año el Cardenal Stickler negó la plenitud de la consagración. El Card. Burke, en 2017, dijo expresamente que ciertamente “el Papa San Juan Pablo II consagró el mundo, incluyendo Rusia, al Inmaculado Corazón de María (…). Sin embargo, hoy, una vez más, escuchamos la llamada de la Virgen de Fátima a consagrar Rusia a su Inmaculado Corazón, de acuerdo con su instrucción explícita”. Cfr. www.infovaticana.com, 19 de mayo de 2017. Original: http://voiceofthefamily.com/breaking-cardinal-burke-calls-for-consecration-of-russia-to-immaculate-heart-of-mary/
[19] Al parecer Juan Pablo II habría incluido a Rusia en la fórmula de consagración, pero fue presionado y desaconsejado por sus colaboradores que veían en la mención una provocación a los soviéticos. Esto lo dijo Mons. Paul Jozef Cordes, vicepresidente del Pontificio Consejo para Laicos, en una entrevista publicada por 30 Giorni, en marzo de 1990. Ya cardenal, el 13 de mayo de 2017, en el sermón de clausura del Congreso Mariano de Kazakhstan, declaró que Juan Pablo II “se abstuvo de mencionar explícitamente a Rusia, porque los diplomáticos del Vaticano le pidieron insistentemente que no mencionara dicho país, porque podrían surgir eventualmente otros conflictos políticos (…) Poco después fui invitado por él a almorzar. Le confió a nuestro pequeño círculo el deseo que él tuvo de mencionar asimismo a Rusia en dicha consagración, pero que él cedió luego a sus consejeros”. Cfr. https://w2.vatican.va/content/francesco/la/letters/2017/documents/papa-francesco_20170426_lettera-cordes.html
[21] Esta es la opinión de los sacerdotes del grupo The Fátima Cruzader, PP. Andrew M. Césanek y Nicholas Grüner; también de Mark Fellows en su libro Fatima in Twilight (2003); del P. Kramer y de Antonio Socci en su obra Il Quarto Segreto di Fatima (2006); de Andrea Tornielli en Il Segreto Svelato (2000); Marco Tossati, Il Segreto Non Svelato, (2002), Solideo Paolini en Fátima, non Disprezate le Profezie (2005), el citado P. Gérard Mura, Fátima-Roma-Moscú (2005); y de Christopher A. Ferrara en su El Secreto todavía ocultado: estudio sobre la campaña personal emprendida por el Secretario de Estado Vaticano para ocultar las palabras de la Virgen contenidas en el Tercer Secreto de Fátima, (2011).
[22] Carta de Sor Lucía a la Madre Martins, 1970. Martins dos Reis, Uma vida ao Serviço de Fátima, Porto, 1972 (Con imprimatur del Obispo de Leiria, Monsignor Joao Venancio).
[23] Jacinta vio lo siguiente: “vi al Santo Padre en una casa muy grande, de rodillas, delante de una mesa, con las manos en la cara llorando…”. Y aquellas otras que culminaron con el diálogo entre ella y Lucía: Jacinta “-¿Puedo decir que vi al Santo Padre y a toda aquella gente? Lucía: -No. ¿No ves que eso hace parte del Secreto?”.
[24] El Cardenal Ottaviani preguntó en 1955 a Sor Lucía, por qué debía ser abierto no antes de 1960, ella respondió “porque entonces aparecerá ‘mais claro’”.
[25] El primer día fue, como refiere el P. Mura, la primera victoria de la fracción liberal frente a los obispos conservadores, logrando aplazar las elecciones de los miembros de las comisiones y modificaron la lista de candidatos preparada por Roma.
[26] Cfr. Atila Sinke Guimaraes, En las Aguas Turbias del Concilio Vaticano II, (del autor), Los Ángeles, 2010, pp. 157-158. En esta obra (p. 158 y ss., nota 86), se hace un repaso de varios prelados que lamentaron esta omisión.
[27] Cfr. R. Wiltgen, El Rhin desemboca en el Tiber (The Rhine Flows into the Tiber), p. 274.
[28] En R. Graber, Athanasius und die Kirche unserer Zeit, Josef Kral, Abensberg, 1973, pp. 69-70.
[30] También lo es la visión de los portales de internet más oficiosos. Por ejemplo Aciprensa, que sigue difundiendo los errores históricos y de hermenéutica que hemos detallado. Cfr. https://www.aciprensa.com/noticias/8-claves-para-comprender-el-tercer-secreto-de-fatima-96172
[31] Roberto de Mattei, Aniversarios que se conmemoran en 2017, en: https://adelantelafe.com/aniversarios-se-conmemora-2017/amp/

3 comentarios:

  1. Cuanto conocimiento mi estimado. Para los sencillos, entre los que me encuentro, se reaviva el deseo de rezar el Santo Rosario como una tabla de salvación para el mundo. Pero luego de leer esto... mi corazón se sigue estrujando de dolor ante los embates del enemigo, enemigo que tenemos en las filas de la jerarquía. Gracias por compartir

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    1. Así es. Hoy el enemigo está tanto afuera como adentro. Y es muy sutil y astuto. Por eso consideré lo mejor redactar esta advertencia para que no se pervierta el mensaje de la Virgen. La Verdad debe ser dicha. ¡Viva Nuestra Madre de Fátima!

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  2. excelente, responde a los interrogantes que me hacía respecto al los secretos de Fátima. Muchas gracias.

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